En tercer lugar, determinar la dirección de la caída estudiando el árbol a la vez que la dirección del viento que sople ese día así como valorar las zonas de escape en caso de emergencia. En cuarto lugar, el personal cualificado utilizará la técnica de corte adecuada la cual depende del diámetro del tronco, el tamaño del árbol y la ubicación del mismo, las herramientas correctas en manos de profesionales no solo facilitarán el trabajo sino que también llevará consigo una jornada laboral más segura tanto para el trabajador como para el entorno. Por último, se debe transportar el árbol dentro de las normas de seguridad establecidas en estos casos.
Antes de poder realizar la tala de un árbol se debe consultar la normativa vigente, así como presentar los permisos necesarios.
Además hay que tener en cuenta que con el objetivo de proteger el medio ambiente la tala de árboles requiere de una serie de permisos y licencias que de no solicitarse implican multas astronómicas, incluso si el árbol a talar se encuentra en una propiedad privada. Para poder obtener el permiso se ha de presentar una solicitud en el Ayuntamiento o junta municipal, aportando toda aquella documentación que se requiera desde la administración. La ordenanza de la tala de árboles es bastante similar en casi todas las Comunidades Autónomas.
Desde Ajardina no sólo realizamos la tala con garantías dejando en manos de profesionales del sector esta labor en ocasiones peligrosa sino que, además, le facilitamos los trámites necesarios para el obligado procedimiento administrativo y toda aquella documentación necesaria para el proceder de la tala de árboles.
Nuestros profesionales antes de llevar a cabo cualquier trabajo asesoran al cliente sobre la opción más adecuada para el problema y la mejor de las soluciones.