La poda de altura y también conocida como poda en altura es un trabajo especializado que requiere de profesionales altamente formados tanto a nivel práctico como teórico. Nuestros operarios disponen de formación acreditada en poda de árboles ornamentales, trabajos en altura y manejo de motosierras, así como la experiencia de más de 2.000 trabajos realizados.
Los restos vegetales se llevan a plantas de tratamiento de madera autorizados por la Comunidad de Madrid. Asimismo disponemos del Seguro de Responsabilidad Civil, obligatorio para esta actividad.
¿En qué consiste la poda de árboles?
Por poda de árboles se conoce al proceso de recortar un árbol u arbusto. Cada árbol tiene unas características concretas y unas necesidades específicas, por tanto, la poda de árboles no debe ser igual en todas las especies. Se denomina poda de altura a aquel trabajo de poda que se realiza a dos metros de altura.
Las podas más comunes son:
- Poda de formación. Este método de poda es primordial para que los árboles consigan en su edad adulta un tronco robusto y unas ramas fuertes y bien orientadas. Se empieza a llevar a cabo cuando el ejemplar cuenta con dos o tres años de vida y se sigue realizando hasta que alcanza la edad adulta ayudándolo en todo este tiempo a desarrollarse correctamente orientándolo en su crecimiento. Gracias a este tipo de poda los árboles, estos requerirán de menos intervenciones cuando sean adultos.
La poda de formación dirige al árbol desde sus inicios y es la clave para su correcto desarrollo.
- Poda de mantenimiento. La poda de mantenimiento engloba dos tipos de poda: la poda de limpieza y la poda de seguridad. Con la poda de limpieza se extraen todas aquellas partes del árbol que implican un desgaste sobre la energía del árbol como ramas con codominancia, mal orientadas, secas, enfermas, débiles, rotas, chupones sobrantes…Este tipo de poda es el más habitual en la poda de árboles urbanos ornamentales y suele realizarse cada dos o tres años dependiendo de las necesidades de los ejemplares.
Pero también en los árboles ubicados en suelo urbano se realiza, aunque sólo de manera más puntual, la poda de seguridad. Como su nombre indica se debe ejecutar por temas de seguridad como peligro de caída de ramas y/ o conflictos con el espacio aéreo como cables, señales de tráfico o infraestructuras colindantes.
En árboles urbanos ornamentales las podas son necesarias para evitar conflictos con el entorno.
- Poda de copa. La poda de copa también conocida como reducción de copa o descopado consiste, como su nombre indica, en la eliminación selectiva de ramas o de partes de ellas para reducir altura o anchura de copa. Como todo tipo de poda su ejecución va orientada hacia unos objetivos. En tal caso, los principales motivos son: permitir el acceso de luz solar a viviendas, mantener una distancia de seguridad suficiente con la red aérea de servicios, asegurar la integridad tanto del árbol como de sus ramas principales entre otros.
- Poda de aclareo. La poda de aclareo o despunte es una técnica de jardinería que consiste en reducir la densidad del árbol eliminando el exceso de ramas. El objetivo es favorecer la circulación del aire y la penetración de los rayos solares hacia el interior del ejemplar. A través de este método de poda el árbol o arbusto tendrá un crecimiento más vigoroso y se previenen enfermedades y plagas. Aunque también la poda de aclareo se utiliza en jardines pequeños o fincas privadas para mantener a los ejemplares dentro de unos parámetros de altura, espesor y forma sin perder su biología natural.
- Poda de invierno. La poda de invierno o poda en seco se realiza durante el reposo vegetativo de los ejemplares que coincide con la estación del invierno. Durante esta época se ven mejor las ramas “sobrantes” en los árboles de hoja caduca y además cuando se inicia el rebrote coincide con la primavera. Se ejecuta sobre los árboles ornamentales, frutales, arbustos, trepadoras y rosales.
A la hora de podar hay que tener en cuenta que hay especies que sangran mucho a través de los cortes realizados con las podas y trabajando sobre ellos durante el letargo invernal la pérdida de savia se reduce al mínimo.
Gracias en parte a los cuidados regulares que deben realizarse a los árboles, entre los cuales se encuentra la poda, se evitan la mayor parte de enfermedades, plagas, etc… manteniendo la buen salud de los mismos.
La poda de altura es una práctica frecuente en el arbolado urbano, ya que a través de esta labor se prevén accidentes como la caída de ramas, obstrucción de señales de tráfico así como llevar un control sobre las dimensiones del árbol.
¿La poda es necesaria para conservar los árboles en buen estado?
Si, es necesaria ya que así mejora su floración y domina su volumen.