El arbolado urbano, tanto público como privado, constituye una parte imprescindible de la infraestructura verde de las ciudades. Este elemento vivo es vital para el bienestar individual y social de los ciudadanos, por tanto, se debe velar por su preservación.
Para poder conservar y proteger los árboles urbanos es necesaria una adecuada gestión. Esta debe ir encaminada a mejorar su desarrollo, su continuidad en el tiempo a la vez que hacerle más fácil su supervivencia en un medio tan hostil para ellos como las grandes urbes.
La poda en Madrid, el riego o los tratamientos contra los agentes patógenos que los atacan son solo algunas de las actuaciones que se llevan a cabo para obtener árboles urbanos bellos, además de más sanos y seguros.
El arbolado urbano en Madrid.
La ciudad de Madrid tiene plantados árboles en el 54% de sus calles. Su extenso patrimonio arbóreo, reconocido a nivel internacional, cuenta con algo más de 235.000 ejemplares distribuidos, no solo por sus calles, sino también por plazas, parques urbanos, jardines, zonas verdes, etc. Además en la capital de España se pueden disfrutar de más de 226 especies arbóreas diferentes.
Todo este extenso patrimonio ha llevado a que desde el Ayuntamiento de Madrid se hayan establecido políticas de ecología urbana para mejorar la calidad de vida de los árboles y su sostenibilidad. El Plan Estratégico de Zonas Verdes, Arbolado y Biodiversidad (PEZVB) recoge 180 actuaciones concretas. Estas incluyen desde inspecciones periódicas con el fin de detectar anomalías hasta estudios de viabilidad de nuevas plantaciones, pasando por labores de limpieza y acondicionamiento del entorno del árbol, atender y dar solución a todos aquellos conflictos generados entre el árbol y la ciudad, entre otras acciones.
Compromiso especial merece la poda de árboles en Madrid. Concienciados desde el Consistorio madrileño que la poda es fundamental para el correcto desarrollo de los ejemplares y la resolución a muchos conflictos, esta se ejecuta anualmente en los meses de noviembre a marzo.
Poda de árboles en Madrid.
La poda consiste en eliminar ciertas ramificaciones de una planta o árbol para lograr un objetivo. En el caso de los árboles urbanos, su principal finalidad es reducir el volumen y la altura de las copas que presentan estructuras descompensadas, excesivamente voluminosas o ramificaciones débiles o quebradizas. Asimismo en las ciudades y, sobretodo en las grandes urbes, debido a deficientes planes estratégicos ejecutados en el pasado, el desarrollo de algunos ejemplares puede llevar a conflictos. Daños en edificaciones colindantes o infraestructuras, ocultación de semáforos o señalizaciones viarias son algunos de los motivos por los que se debe realizar la poda de árboles en Madrid.
En el caso de los árboles urbanos, muchos de estos ejemplares cuentan con una altura considerable lo que imposibilita su poda desde el suelo o con una simple escalera. En estos casos, los operarios deben ejecutar un trabajo a varios metros de altura con maquinaria y herramientas adecuadas. Sin duda, la poda en altura en Madrid siempre debe realizarla una empresa de poda en Madrid que garantice no solo un trabajo correcto sino también un trabajo bajo todas las medidas de seguridad necesarias.
Responsabilidad de los propietarios
Ya hemos hablado de las actuaciones que desde el Ayuntamiento se llevan a cabo para proteger y conservar los árboles urbanos, pero un árbol u árboles plantados en un terreno privado no exime al propietario de obligaciones y responsabilidad civil en caso de causar daños a terceros.
Toda aquella persona o comunidad de propietarios que tenga dentro de su propiedad un árbol o árboles debe cumplir la normativa municipal en materia de arbolado. Por tanto, el propietario debe llevar a cabo todas las actuaciones necesarias para mantener en buen estado de salubridad sus ejemplares. En el caso de la poda de árboles en Madrid se requiere de un permiso administrativo o autorización que será concedido por los Concejales Presidentes de las Juntas Municipales de Distrito, previo informe. Si el propietario la ejecutase sin permiso, sería sancionado económicamente o, lo que es lo mismo, tendría que pagar una multa por podar un árbol sin permiso.
Pero no solo hay que pedir permiso para podar un árbol, sino que para cortar un árbol en Madrid también se debe realizar bajo los parámetros que marca la Ley 8/2005, de Protección y Fomento del Arbolado Urbano de la Comunidad de Madrid y la Ordenanza Municipal.
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