30 Mar Poda de árboles en la Moraleja: Su jardín en las mejores manos
La Moraleja es una zona residencial del norte de Madrid ubicada en un enclave geográfico privilegiado. Conocida por su rico patrimonio arbóreo y por sus chalets privados con extensos jardines. En estos casos, además del Ayuntamiento de Alcobendas también los propietarios tienen la obligación de mantener en buen estado de salubridad toda la vegetación existente. Es por ello, que sus jardines siempre deben estar en las mejores manos.
Una correcta gestión del arbolado urbano en la Moraleja es fundamental para conservar su patrimonio arbóreo.
Su patrimonio arbóreo forma parte del paisaje natural y lo constituyen todos los árboles situados tanto en suelo público como aquellos plantados en chalets o propiedades privados. Siendo la poda de árboles en La Moraleja un trabajo necesario para garantizar que este rico patrimonio natural continúe en un futuro. En cuanto a su diversidad y densidad arbórea es muy diferente al resto de los ejemplares existentes en Madrid capital. Por esta razón, a la hora de tratar estos ejemplares se deben tener amplios conocimientos arbóreos y de cultura arquitectónica, puesto que, son parte importante del espacio urbano. Solo de esta manera, el árbol urbano no entrará en competencia con el resto de infraestructuras.
Poda de árboles en La Moraleja.
A la hora de podar se deben tener en cuenta las exigencias de las diferentes especies, de la situación concreta de cada ejemplar, de la resistencia a ataques externos, así como el tipo de poda a realizar. Solo contratando los servicios de una empresa de jardinería en Madrid, garantizamos que los jardines se encuentren en las mejores manos gracias a un mantenimiento adecuado de toda la vegetación y, sobretodo, una adecuada poda de árboles.
Un jardín requiere de manos cualificadas para lucir sano y bonito.
Un podador inexperto puede destruir en breves instantes todo el valor medioambiental que aportan los árboles, así como la belleza que estos reflejan en cualquier jardín, calle, avenida, etc.
La poda de árboles siempre tiene una finalidad clara y, en el caso, de la poda de árboles en La Moraleja esta debe ir encaminada a salvaguardar todo el patrimonio natural. Conocer la técnica de poda, el tipo de poda a ejecutar así como las herramientas de poda necesarias son puntos fundamentales para un correcto desarrollo de los ejemplares fuera de su hábitat natural. Hay que recordar que un crecimiento inadecuado en caso de jardines privados lleva muchas veces a conflictos vecinales. También gracias a la poda se evitan accidentes ante las diferentes inclemencias metereológicas como caídas, roturas de ramas, etc…así como problemas con cableados, infraestructuras o pavimentos.
En cualquier caso, jamás debe ponerse en manos de personal no cualificado las labores de poda. Contratando los servicios de Ajardina con más de una década de experiencia y miles de trabajos realizados en la Comunidad de Madrid podemos garantizar que su jardín está en buenas manos.
Tipos de poda frecuentes en árboles urbanos.
Como ya hemos mencionado anteriormente, la poda muchas veces va encaminada a evitar accidentes o conflictos vecinales debido a erróneas decisiones del pasado. Pero en otras ocasiones los trabajos de poda de árboles en La Moraleja llevan consigo objetivos bien distintos. Para alcanzarlos existen diferentes tipos de poda según edad del ejemplar y necesidades concretas de cada uno, además de las exigencias propias de cada especie. Los trabajos de poda deben realizarse dentro del periodo idóneo para la especie arbórea y el tipo de poda. De manera excepcional, aquellas podas cuya razón sea su situación y/ o seguridad se ejecutarán ipso facto.
Los tres tipos de poda más frecuentes en árboles urbanos en La Moraleja son:
- Poda de formación. Para evitar podas drásticas en un futuro, la plantación de árboles debe ajustarse a la especie adecuada además de tener en cuenta el espacio aéreo existente para su correcto desarrollo. Las podas de árboles en La Moraleja durante su formación evitan errores de estructura en el futuro. Esta se realiza con el objetivo de establecer una estructura robusta con ramas fuertes formando así un ejemplar con un esqueleto resistente.
La poda de formación es fundamental para conseguir estructuras fuertes.
Además la poda de formación ayuda a guiar a los árboles jóvenes en su crecimiento para que en un futuro no entren en conflicto con el resto del paisaje urbano.
- Poda de mantenimiento. Una vez que tenemos el árbol bien formado, esto es, una copa con cierta altura y densidad así como unas ramas bien estructuradas tanto las principales como las secundarias, se puede ejecutar (siempre que se requiera) la poda de mantenimiento o limpieza. En árboles urbanos ornamentales no es imprescindible realizarla cada año, sino cada 2 o 3 años.
La poda de mantenimiento consiste en dar un repaso al ejemplar eliminando aquellas partes vegetales que son indeseables y restan salud al árbol tales como: ramas muertas, dañadas, enfermas, con riesgo de rotura, chupones e, incluso, aquellas que se entrecruzan o se tocan. También dentro de la poda de limpieza o mantenimiento se encuentra el clareado de la copa. Este trabajo de limpieza de la copa se realiza para mejorar el paso de la luz y la circulación del aire hacia el interior. Jamás debe cortarse más de 1/4 de la copa de una sola vez sino es por motivos de seguridad.
- Poda de seguridad. Cualquier poda debe tener un objetivo claro predeterminado. En el caso de la poda de seguridad, su propio nombre lo indica: se ejecutará por motivos de seguridad tanto para el árbol como para el entorno urbano y/o personas.
Los árboles urbanos viven y se desarrollan fuera de su ambiente natural. En muchas ocasiones, el hecho de estar plantados en sitios incorrectos puede traer consigo consecuencias nefastas. El conflicto con edificaciones, señalizaciones o cableado puede representar un peligro. Por otro lado, las inclemencias meteorológicas pueden derivar en árboles de estructuras débiles con riesgo de fractura en ramas o tronco. Gracias a la poda de seguridad se evitan males mayores y se corrigen daños físicos sufridos por el ambiente urbano.
No olvidemos que la poda de árboles es aquel trabajo que el hombre aplica a los árboles con un propósito definido, siendo esta una labor fundamental en árboles urbanos.
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